La presentación fue una mera declaración de intenciones “abierta a las aportaciones” apenas definidas y sin concretar medidas de acción, de gestión o de presupuestos asociados. No es de recibo a estas alturas plantear un documento abierto a aportaciones. Estamos en tiempo de aplicación de soluciones al grave deterioro de la Atención Primaria de Salud.
Por otra parte, bastantes de las propuestas no son viables en el momento actual. La continuidad de la atención, las opciones basadas en la digitalización, o la atención integral, que se enuncian en el plan de acción, son inviables si no se tiene plantillas consolidadas, hay fibra óptica y equipamientos en la totalidad de centros de salud y consultorios, o no se han planteado nuevas formas de gestión y ampliación de plantillas que hagan posible siquiera las propuestas que plantean.
A todo ello se une la nula visión comunitaria o de aportaciones de profesionales como psicología o fisioterapia que se plasma en las propuestas, y sobre las cuales la única concreción que ofreció el Director General de Salud es la negociación que se está llevando a cabo con el Colegio de Fisioterapeutas. ¿Para una nueva privatización como la que se llevó a cabo con la Salud Bucodental?
