La pandemia de Covid-19 ha puesto de manifiesto las carencias de nuestro actual sistema socio-sanitario, de las residencias privadas concertadas, concertación que se debiera reducir a residencias gestionadas por entidades sin ánimo de lucro. No por ello estamos asistiendo a ese necesario proceso de reforma, con medidas de calado dirigidas a mejorar las condiciones de vida de nuestros y nuestras mayores y las condiciones laborales para las personas que trabajan en las residencias.
Desde la Plataforma Navarra de Salud/Nafarroako Osasun Plataforma tenemos claro que es necesario un cambio de modelo, que la gestión y titularidad de las residencias debe ser pública y que debemos repensar la forma en que desarrollan su vida las personas mayores en estos centros con mayor participación de profesionales, personas residentes y familias. Somos conscientes de que todo esto no puede materializarse todo lo rápido que desearíamos, ni siquiera con la voluntad política necesaria, algo de lo que parece carecer en este momento el Gobierno de Navarra. Por ello, en tanto en cuanto se mantenga el actual modelo basado en la concertación con instituciones privadas sería exigible que se den algunas condiciones básicas orientadas a un mayor control público de las residencias y a una mayor transparencia en su gestión.