El 7 de abril se celebra el día mundial de la salud, una fecha que debe ir más allá de una mera conmemoración formal y suponer una oportunidad de reflexionar sobre el verdadero valor que la salud tiene para las personas y las colectividades así como sobre los factores que la condicionan.
Lamentablemente, cada vez vemos más en entredicho el derecho universal a la salud y cada vez son más las políticas y planes que contribuyen a la mercantilización de la salud, favoreciendo así el negocio en torno a nuestras necesidades tanto sanitarias como socio-sanitarias y generando desigualdades en la población a la hora de acceder a una adecuada protección de la salud ya sea en su vertiente preventiva como curativa.
En este sentido, nos hacemos eco de la campaña impulsada por la Red Europea Nuestra Salud No se Vende que lleva como título “La salud antes que el mercado… Cambiemos Europa” y que pretende interpelar a las instituciones europas para detener el actual sometimiento de la salud pública a las leyes del mercado y promover que se refuercen los sistemas sanitarios y de protección social. En este sentido, se identifican 7 ejes en los que implementar iniciativas políticas:
1-Una financiación suficiente, cese de las restricciones que Europa impone a los presupuestos de protección social y salud.
2-Sacar la salud del mercado, impedir un sistema de dos niveles en el que sólo las clases pudientes puedan acceder a una atención de calidad.
3-Acabar con la dinámica en la que cada vez aumenta más la proporción de poblaciones excluidas de la atención sanitaria debido a los copagos, tiempos de espera cada vez más largos, escasez de personal, brecha digital o el alejamiento de los servicios de salud.
4-Promover la democracia sanitaria e incentivar una acción colectiva sobre los problemas de salud de la población.
5-Actuar sobre las desigualdades sociales y las condiciones de vida, en términos de medio ambiente, vivienda, condiciones de trabajo, estrés e incertidumbre para el futuro,…
6-Impulsar una política europea de medicamentos que no anteponga los intereses financieros a los intereses de salud pública. No permitir que la industria farmacéutica imponga sus intereses.
7-Proteger al personal sanitario con unas adecuadas condiciones laborales y terminar con la pugna entre países por el personal sanitario.
Cada uno de estos puntos se expresa con distintos matices en cada territorio pero no dejan de ser aspectos que de una forma u otra están presentes en la realidad sanitaria que vivimos. Concretamente aquí y ahora, afrontamos una nueva amenaza mercantilizadora de la salud. Más bien se trata de un agravamiento de la situación debido a las iniciativas políticas y sindicales que se dirigen hacia una mayor asunción de competencias por parte de las Mutuas laborales.
En estos momentos se está negociando que estos entes que tienen como prioridad salvaguardar los intereses empresariales y que funcionan con dinero público procedente de la Seguridad Social, asuman la atención sanitaria de los procesos de tipo traumatológico de origen común de los y las trabajadoras facturándola al Sistema Público de Salud. El objetivo es reducir el absentismo, utilizando para ello fondos públicos y generando una incipiente dualidad en el sistema sanitario público en el que la atención comienza a diferenciarse en función si se pertenece a la población activa o no.
Nos preocupa que los sindicatos UGT y CCOO acepten esta propuesta, por mucho que la quieran condicionar a tener garantías sobre la continuidad de la jubilación parcial. De hecho, este condicionamiento deja a las claras que se trata de un retroceso en términos de salud que se toleraría a cambio de otro tipo de ventajas en el ámbito laboral, algo inaceptable.
En Navarra se ha forjado un compromiso político parlamentario que rechaza la asunción de más competencias por parte de las Mutuas pero resulta totalmente necesario lograr garantías en el marco normativo que nos protejan en el futuro así como al resto de territorios.
Instamos al conjunto de la sociedad a mantener una actitud crítica y activa frente a la mercantilización de la salud en cualquiera de sus formas, no ya en esta jornada del 7 de abril sino de forma cotidiana, pues es mucho lo que nos jugamos.
Nafarroako Osasun Plataforma /Plataforma Navarra de Salud
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